Diego Ruiz de la Peña Ruiz

Diego Ruiz de la Peña Ruiz

Ovetense de nacimiento, estudié en la Universidad de Oviedo, donde me licencié en Historia del Arte, cursando mi último año de licenciatura en la universidad italiana de Perugia. Posteriormente, completé mi formación académica con un Máster en Museología y Museos de la Universidad de Alcalá de Henares. Mi vida laboral se ha desarrollado siempre en el mundo de la cultura, tanto en el ámbito de la gestión cultural, con experiencia en la gestión de equipos de trabajo y la dirección de proyectos de ámbito nacional e internacional, como en aquellos vinculados al estudio, protección, rehabilitación y difusión del patrimonio cultural.

Especializado en catalogación urbanística, he participado en los Catálogos de diferentes concejos asturianos y he sido coordinador del Registro General del Patrimonio Cultural y Natural de Asturias. Fruto de esta experiencia, en 2012 coordiné el libro “Los Catálogos Urbanísticos en el Principado de Asturias. Una perspectiva pluridisciplinar”, editado por la Universidad de Oviedo.

Con la llegada de la crisis, tuve la necesidad de reinventarme y, en 2011, fundé una empresa de gestión cultural desde la que hemos trabajado en los ámbitos de la consultoría cultural y turística y la puesta en valor del patrimonio cultural, haciendo hincapié en el uso de las nuevas tecnologías.

Gracias a mi trayectoria laboral y personal, he podido conocer múltiples lugares y rincones de la geografía asturiana. Por ello, me siento plenamente identificado con la identidad de Asturias. Siempre he considerado que nuestros pueblos y ciudades nos hablan de nosotros mismos por medio de los vestigios materiales del pasado y esa historia común es la que debemos conservar y trasmitir.

Afortunadamente, mi familia eligió venir a Llanes hace ya muchas décadas, y es aquí donde decidí fijar mi residencia y apostar por un proyecto vital en el pueblo.


Motivación

A lo largo de mi vida laboral he tenido que sentarme en los despachos de muchos cargos públicos: concejales, alcaldes, directores generales, consejeros… y lo que he podido comprobar es la ausencia generalizada de talento, valentía y voluntad de nuestros políticos. Muchas veces el ciudadano tiene la sensación de que, cuando se topa con quienes toman decisiones, se encuentra con un muro, con un espectador ausente que, más allá de las buenas palabras, no es capaz de dar respuesta a una necesidad, a una idea o a un proyecto. Creo firmemente que las cosas se pueden hacer de otra manera, debemos trabajar para conseguir una Administración más flexible, más permeable tanto a las necesidades como a las ideas. Apuesto por una gestión proactiva, transparente, creativa, cercana y flexible, esto es lo que defendemos en Podemos Llanes.

Llanes necesita un cambio de rumbo, debemos entender que las dinámicas partidistas del pasado han terminado, que hemos entrado en un nuevo escenario político que requiere capacidad de diálogo, colaboración y trabajo en equipo.

El municipalismo se ha erigido en una nueva oportunidad para entender la política, una política cercana al ciudadano y centrada en el día a día de l@s vecin@s. Las ciudades y los concejos son ahora la mayor esperanza para la democracia. Es, en la escala local, donde podemos volver a situar a las personas en el centro de las políticas públicas.

Ha llegado el momento de dar un paso al frente, con ilusión y responsabilidad, para devolver a esta tierra lo mucho que me ha dado.